Pertenece al Ministerio de
Cultura y está bajo la administración de la Academia de Historia de Ocaña.
Arquitectura: Arquitectura colonial doméstica urbana del siglo XVII. Paredes en
tapia pisada; cubierta de madera, caña brava y teja española; dos plantas con
balcón corrido hacia el costado norte; piso en baldosa de barro.
Tradicionalmente, se atribuye su propiedad al encomendero Don Antón García de
Bonilla, el último de por los menos cuatro personajes que llevaron este mismo
nombre y con cuyos aportes se estableció el primer colegio de jesuitas en
Ocaña. Este encomendero, participó también activamente en el proceso de
poblamiento de Río de Oro (Cesar)
Fue organizado en 1973 por una Junta Cívica a la cual pertenecieron,
entre otros: Juan Manuel Duque Carvajalino (arquitecto), Astolfo Castilla
Jácome, Mary Sánchez Gómez, Rafael García de la Rosa, Juan Romano Marún (miembros de la Academia de
Historia de Ocaña), previa restauración de la casona en que se encuentra, siendo Ministro de Obras Públicas el doctor
Argelino Durán Quintero.
Inicialmente, el Museo funcionó en el inmueble que el Ministerio de
Obras Públicas adquirió para tal fin, funcionando igualmente allí la antigua
Casa de la Cultura y la Academia de Historia de Ocaña. Cuando la casona pasó a
la Escuela de Bellas Artes, debido a que la Alcaldía Municipal no pudo
administrarla, las colecciones fueron relegadas a un segundo plano,
incluyéndose un período de cerca de 10 años, en el cual el Museo fue cerrado y
sus colecciones desatendidas, todo lo cual causó grave deterioro a los objetos.
En 2003, la Asociación Juan C: Pacheco inició la gestión para lograr el
cumplimiento de la Ley 10 de 1977 mediante la cual se creaba el Museo de la
Gran Convención en el antiguo claustro de San Francisco.
Fue así como se produjo la visita de la antropóloga Liliana González
Jinete y u equipo técnico del Museo Nacional de Colombia, adelantándose una
evaluación de las colecciones y se hizo mantenimiento preventivo. Se
escogieron, entonces los objetos que conformarían el Museo de la Gran
Convención, procediéndose a su apertura en 2003. Así mismo, fueron también
escogidos los objetos que se exhibirían en el Museo Antón García de Bonilla. Al
año siguiente, se llevó a cabo la primera distribución de espacios y
localización de vitrinas, labor que fue hecha por un equipo interdisciplinario
de la Universidad Externado de Colombia, reabriéndose el Museo al público el 7
de mayo de 2004.
El martes 8 de abril de 2004, el museo
Antón García de Bonilla abrió nuevamente sus puertas a la comunidad, después de
los trabajos de renovación museográfica adelantados por la restauradora y
conservadora Astrid Fajardo y la arquitecta Irene Carolina Corredor, del
programa Fortalecimiento de Museos del Ministerio de Cultura.
Correspondió a William Gamboa realizar el
guión museológico con base en la investigación histórica hecha por la Academia
de Historia de Ocaña. Desde Ocaña se aportaron anotaciones, sugerencias y
opiniones del maestro restaurador José Miguel Navarro Soto quien dirigió la
fase final del montaje de los objetos, con el apoyo del grupo de servicios
generales de los museos de Ocaña.
Para determinar qué tipo de distribución requería el Museo Antón García
de Bonilla, se tuvo en cuenta la localización de la casona donde funciona y su
historia. El cambio de denominación de las Salas de Exposición Permanente
obedece a una interpretación integral del desarrollo socio económico, histórico
y cultural de Ocaña desde la época prehispánica hasta el siglo XX.
Los apoyos museográficos
permitirán a los visitantes una lectura fácil de los diversos periodos
históricos de Ocaña, facilitando los recorridos y la comprensión contextual, a
la manera de los museos ubicados en Bogotá y otras capitales.
Uno de los propósitos buscados con esta nueva distribución de salas y
los apoyos museográficos, es buscar la participación reflexiva de la comunidad
sobre las colecciones de artes, historia y arqueología con que cuenta el Museo
Antón García de Bonilla y, de paso, de nuestra misma historia.
Que el Museo aumentara su ya posicionado lugar de encuentro ciudadano y
que los servicios que ha venido prestando mejoren en calidad y eficiencia,
garantizarán la consolidación de la institucionalidad cultural pública, con el
apoyo permanente que se sigue recibiendo del Programa Fortalecimiento de Museos
del Ministerio y los aportes del programa Nacional de Concertación para la
realización de algunas exposiciones temporales.
El 8 de abril, fecha en que también se decidió conmemorar la firma del
Acta del Independencia de la ciudad de Ocaña para fortalecer nuestra memoria
histórica, comenzó una nueva etapa en la vida del museo.
En 2006, se llevó a cabo una segunda intervención arquitectónica al
inmueble (la primera se hizo en 1973), por parte de las Sociedad de Arquitectos
Capítulo Ocaña, con recursos provenientes del IVA, gracias a la colaboración de
la Gobernación de Norte de Santander, Secretaría de Cultura, bajo la
responsabilidad de la doctora Olga Patricia Omaña Herrán, y la gestión de los
Vigías del Patrimonio Cultural, bajo la coordinación de la señora Martha
Pacheco de Páez.
Esta nueva restauración, permitió que se ampliara el espacio para
exposición, de 4 (111,77 m2 ) a 7 (226, 6 54 m2 ) salas, que en su orden
fueron:
Sala 1. Personajes
Sala 2 y 3. Arte religioso
Sala 4. Vida cotidiana XIX
Sala 5. Siglos XIX y XX
Sala 6 .Época prehispánica
Sala 7 Exposiciones temporales
En 2007, la Asociación Juan C. Pacheco inició la gestión para restaurar las colecciones
del Museo Antón García de Bonilla, correspondiéndole la asignación de esta
tarea al maestro restaurador de la Universidad Externado de Colombia, José
Miguel Navarro Soto, quien entregó, en 2008, seis óleos y una escultura
completamente restaurados.
La Academia de Historia de Ocaña, en su calidad de administrador
del Museo de Antón García de Bonilla,
por Convenio suscrito con el Ministerio de Cultura, propietario del museo, y el
Municipio de Ocaña, junto con la
Asociación Juan Crisóstomo
Pacheco Zúñiga - Vigías del Patrimonio
Cultural de Ocaña, adelantó acciones en pro de la recuperación del inmueble y
de la colección, así como acciones tendientes al fortalecimiento y gestión
cultural con el apoyo de la Gobernación de Norte de Santander-
Secretaría de Cultura. Con recursos IVA de la telefonía celular, en el año
2005, se intervino una parte del inmueble, el cual estaba abandonado hacía más
de 15 años y se organizaron las 6 salas de exposición permanente; en el año
2007, restauraron con recursos del Ministerio de Cultura 5 óleos y una talla de
madera del siglo XVII; en el mismo año con recursos IVA de la telefonía celular
se organizaron los baños, que estaban en pésimo estado, se adecuó la zona de
cafetería y se restauraron 2 óleos y una talla
en madera; en al año 2007, con el apoyo de la Universidad Externado de
Colombia, se restauraron 2 tallas en madera y 1 escultura; en el año 2008, con
recursos IVA de la telefonía celular se cambio la parte eléctrica de una de las
salas de Arte religioso y de la sala de los convencionistas del Museo de La
Gran Convención, y se hizo la investigación para el guion museográfico de dicha
sala.
El equipo de trabajo del Museo Antón García de Bonilla.
La recuperación del Museo Antón García de Bonilla, es un ejemplo nacional
para mostrar, de lo que se puede hacer con recursos del IVA de la Telefonía
celular (hoy recursos del Impuesto al Consumo), puesto que se logró no solo la
restauración completa de los inmuebles, sino la intervención de las colecciones
de arte e historia, cuyo proceso aun continúa.
En 2019 fueron restauradas tres obras más de este museo y una del Museo
de la Gran Convención de Ocaña.
Durante el tiempo que la Academia de Historia de Ocaña ha venido administrando el Museo, nunca se había presentado una situación anómala como la que ahora ocurre. Seguimos sosteniendo que las Asociaciones Público Privadas APP, no deben intervenir en materia de Museos, Bibliotecas Públicas y Archivos Históricos de Colombia, so pena que la cultura caiga en el desastroso vértice de la mercantilización, que contraría la política que el señor Presidente de la República y la señora Ministra de Cultura han señalado. Es decir, el acercamiento y la interrelación con las regiones.
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Ocaña, 7 de marzo de 2019
COMUNICADO DE PRENSA
La Academia de Historia de Ocaña, que desde 2003 ha venido administrando
los museos del Ministerio de Cultura en la ciudad de Ocaña, Norte de Santander,
se permite informar al gobierno nacional, comunidad ocañera y medios de
comunicación, que de acuerdo con la Resolución N°428 de fecha 1 de marzo de 2019, “Por medio de
la cual se adjudica el proceso de selección de Régimen Especial N° MC ESAL 008
2019” expedida por el Ministerio de Cultura, la administración del Museo de la
Ciudad de Ocaña Antón García de Bonilla fue adjudicada mediante proceso de
selección, a la empresa Corporación de Desarrollo Social Élite, CORPOÉLITE, de
la ciudad de Bogotá.
Hace quince años, la Academia de Historia y la Asociación Juan C. Pacheco –
Vigías del Patrimonio Cultural, procedieron a crear los museos de Ocaña junto
con tres funcionarias de la Red Nacional de Museos, en aquel tiempo bajo la
acertada dirección de la antropóloga Liliana González Jinete. No existían
museos en la ciudad en aquel entonces. Se llevó a cabo una labor de gestión
ante instancias nacionales, departamentales y municipales, para lograr el
mejoramiento de la infraestructura, restauración de colecciones, guiones
museológicos y museográficos y posicionamiento nacional de estas instituciones
que hoy son orgullo de la ciudad y del departamento, y que generan un flujo
turístico considerable, siendo además herramientas para el trabajo fuera del
aula de los centros educativos y epicentro de las investigaciones de propios y
foráneos, en materias como la arquitectura, la historia y el arte.
En 2018, durante el Encuentro de Museos, realizado en Bogotá, fuimos
enfáticos en sostener que entidades como las bibliotecas públicas, museos y
archivos históricos no debían ser objeto de los programas que involucran a las
Alianzas Público Privadas, APP, debido al peligro de su presunta privatización
y restricciones para la comunidad al implementar costos de ingreso a los
museos, asunto que habíamos logrado generalizar para garantizar el acceso de la
comunidad a los servicios de la cultura, como lo prescribe la Constitución Nacional.
De acuerdo con las políticas del doctor Iván Duque Márquez, Presidente de
la República, el gobierno nacional hará presencia en las regiones, como hemos
venido solicitando los bloques regionales de la Costa, Antioquia y los
Santanderes, hace ya muchos años. En este mismo sentido, se pronunció la
doctora Carmen Inés Vásquez Camacho, Ministra de Cultura, en su reciente visita
a Ocaña, donde tuvo la ocasión de conocer el Museo de la Gran Convención y
escuchar de nuestra parte las quejas que le formulamos en materia de protección
del patrimonio cultural regional.
Hemos censurado la política que privilegia el centralismo en detrimento de
las lejanas provincias de Colombia, sujetas a los vaivenes de la burocracia
oficial. No compartimos el hecho que entidades ajenas s nuestra idiosincrasia,
a nuestros intereses regionales en materia de cultura, lleguen a manejar
nuestro patrimonio y las instituciones que fueron forjadas con dedicación,
transparencia y seriedad, como le consta al Ministerio de Cultura, con relación
a la Academia de Historia de Ocaña con la cual ha suscrito convenios desde 2003
para la administración de los museos de Ocaña. El Museo de la Ciudad de Ocaña Antón García de
Bonilla contiene valiosas colecciones de arqueología, historia y arte, cuyo manejo no puede otorgarse a cualquier
entidad foránea con el argumento que su propuesta ganó una licitación pública
(que ahora denominan proceso de selección), como manifestamos en nuestra
solicitud de REVOCATORIA DIRECTA ante el Ministerio de Cultura.
Desconocemos los pormenores en cuanto a quiénes hicieron la adjudicación y
quienes evaluaron la idoneidad para administrar un museo, sin olvidar que
CORPOÉLITE no presenta las calidades debidas para el manejo de instituciones
museales.
De acuerdo con lo anterior, manifestamos nuestro más enérgico rechazo a la
determinación tomada y alertamos a la comunidad para que esté atenta al
desarrollo de los acontecimientos que tendrán como escenario el Museo de la
Ciudad de Ocaña Antón García de Bonilla. En el mismo sentido, solicitamos al
Ministerio de Cultura, la redefinición del Programa Fortalecimiento de Museos
(antes Red Nacional de Museos) y la atenta vigilancia sobre sus funcionarios,
para evitar que lo que una vez fue excelente herramienta de trabajo entre el
Ministerio de Cultura y los museos del Ministerio fuera de Bogotá, continúe
convirtiéndose en una expresión más de la burocracia.
Ocaña, 6 de marzo de 2019.-
LUIS EDUARDO PÁEZ GARCÍA
C.C. 19.094.554 de Bogotá.
Presidente de la Academia de
Historia de Ocaña
Representante Legal.
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