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domingo, 9 de noviembre de 2014

CLUB OCAÑA, 120 AÑOS DE SU FUNDACIÓN (1894 – 11 de noviembre – 2014)


 Algunos de los fundadores y socios del Club Ocaña
1 Emilio Batlle, 2 Adriano Lemus 3 José Dcastro 4 Ernesto Conde
5 Antonio Ujueta 6 Dr. Alejo Amaya 7 Luis Felipe Roca 
8 Manuel Julián Ujueta 9 Don César Paba 10 Luis Eduardo Quintero R.
11 Julio R: Jácome Niz 12 Francisco Aycardi 

En la historia de la ciudad de Ocaña hay un suceso que no se ha estudiado convenientemente: la fundación del Club Ocaña y sus implicaciones económicas, sociales, culturales y políticas para el municipio en estos 120 años de vida que se cumplirán el 11 de noviembre de 2014.




 La sede del Club sobre la calle 11 antre carreras 13 y 14

El inmueble donde funciona actualmente el Club fue declarado como Bien de Interés Cultural de Carácter Departamental mediante Decreto 1144 de 2003, expedido por la Gobernación de Norte de Santander. 

Primer plano a la izquiera. Vieja casona donde se alojó imón Bolívar en 1813, antes de ser 
sede actual del Club. Década de 1920 

La declaratoria obedeció a la importancia histórica y arquitectónica del inmueble, por haberse alojado en él Simón Bolívar en su primera visita a Ocaña, en enero de 1813. Tuvo el Club Ocaña varias sedes antes de ocupar la hermosa casona en que hoy está localizado.

Sede actual del Club Ocaña. Calle 10, costado ocidental de la Plaza
del 29 de mayo

La Ocaña de finales del siglo XIX es una ciudad que  posee un relativo desarrollo urbanístico, económico y cultural. Se beneficia directamente de las exportaciones hacia Europa y los Estados unidos y se da el lujo de importar costosas mercaderías (paños ingleses, cristal de Bohemia, vinos franceses e italianos, aceitunas y aceites),  y objetos de suntuarios como pianos para la recreación de la aristocracia lugareña y costosos espejos que llegan a lomo de mula desde Puerto Nacional y Gamarra. Cuenta con dos tertulias literarias que reúnen a la intelectualidad local, varios periódicos, bandas de músicos, y ya se la conocía nacionalmente por haber sido la sede de la Gran Convención de 1828 y cuna del poeta romántico José Eusebio Caro.

En este marco que describimos someramente, se reúnen los comerciantes más poderosos de la época que tenían el monopolio de las exportaciones e importaciones, y fundan el Club Ocaña.

La fundación del Club Ocaña, el 11 de noviembre de 1894, obedeció, en primera instancia, a la necesidad de la dirigencia social, política y económica dominante, de agruparse y organizar la actividad comercial de la ciudad y la región. Con base en esta circunstancia, comenzó a circular, a partir del 1 de octubre de 1895, el periódico Revista Mercantil, como órgano del Club Ocaña, a través del cual se informaba permanentemente sobre disposiciones legales en materia económica, cambios de moneda extranjera (dólares, francos, libras esterlinas), precios de productos, fletes, ofertas, peajes y pontazgos, importaciones, exportaciones, listado de comerciantes y comisionistas, vías, y noticias, en general. 

 La Revista Mercantil, órgano de divulgción del Club Ocaña. 1895

Entre los fundadores del Club Ocaña vale la pena recordar a personajes como el doctor Alejo Amaya, autor del libro Los Genitores; los ciudadanos extranjeros  W. Brokate, Federico Brokate, Felipe Heineken, José Lébolo (cónsul italiano en Ocaña), Antonio Lébolo, Federico Lébolo, Juan F. O´Brien, Eduardo Meyer (pianista), Pedro Cerruti C., y W. Strieck; el periodista José Domingo Jácome Monroy; el dinámico impulsor de la adecuación de la Plaza Mayor, Manuel Benjamín Pacheco; el compositor Julio R. Jácome Niz, y el artista Juan Manuel Roca G., ancestro del poeta contemporáneo Juan Manuel Roca Vidales.  Hoy descienden de aquellos fundadores: los Cabrales, los Conde, los Pacheco, los Aycardi, los Carvajalino, los García Padilla, los Lemus, los Lobo, los Quin, los De la Rosa, los Paba, los Roca y los Rizo, entre otros.

EL CLUB OCAÑA Y LA CULTURA

Desde su fundación, el Club Ocaña dedicó parte de su actividad a la cultura y las artes. Una de las primeras comisiones que se designó, tenía a su cargo organizar la biblioteca del Club. De igual manera, aprovechando la presencia en la ciudad de destacados artistas como el pianista Eduardo Meyer y las cantantes italianas Ercolessi, llevó a cabo conciertos de música clásica en sus salones pocos años después de la fundación.

Conferencias de escritores como Luis Eduardo Páez Courvel y Felipe Antonio Molina en la década de 1930 y 1940, fueron frecuentes, al igual que la presentación de obras de literatura. Para 2008 y años subsiguientes, apoyó a la Academia de Historia de Ocaña en la celebración de sus Semanas de la Gran Convención y en 2010 se unió  la celebración del Centenario de creación del departamento Norte de Santander. En sus salones han expuesto reputados artistas como Jorge Riveros Salcedo y se han llevado a cabo muestras colectivas de artistas plásticos de la región.

La siguiente, es una reseña de la conferencia dictada por el escritor y periodista Felipe Antonio Molina, en 1932:

“En la noche del domingo 8 de agosto de 1932, en los salones del Club Ocaña, don Felipe Antonio Molina dictó una conferencia que tituló Ocaña, la mujer y la sierra, que vio la luz como publicación ese mismo año en la editorial Gómez Hermanos, dedicada “Al Pbro. D. Francisco C. Angarita, que sabe como el que más del alma y de las cosas de estos valles”. La breve presentación de la obrita, corrió a cargo del intelectual venezolano Gonzalo Carnevali, quien por ese tiempo se encontraba asilado en Ocaña después de haber sufrido la persecución política en su país de origen. El doctor Carnevali, decía en su escrito: “…Pienso que de no haber sido escritor, de no haberse dedicado a vaciar en cuartillas el manantial interior, Felipe Antonio Molina habría sido guerrillero, señor de sierras y andurriales, cacique de pueblo, ilustre personaje de esos que acarician como a una mano de mujer, con fruiciosa voluptuosidad, la culata de su pistola, o raro contraste, muy frecuente en espíritus de honda fermentación y clamorosa turbulencia, Cartujo consagrado a Dios, para quien disciplinas y cilicios y padecimientos tejen, en el silencio de una celda y a lo largo de toda una vida, la exaltación ultraterrena de la contemplación y del arrobo”.

La bandera que hoy ostenta Ocaña, fue ideada para el Club por el socio Juan Manuel Duque Carvajalino.

 Una de las semanas culturales del Club Ocaña, cuando se galardonó
al historiador y catedrático Jorge Meléndez Sánchez

Los 60 años del Club Ocaña. Para conmemorar esta efeméride, las directivas del Club llevaron a cabo diferentes actvidades culturales y sociales, editando un bien logrado folleto en el cual se hace la reseña histórica de la entiidad, sus socios fundadores, activos y asistentes.

 En 1994, cuando el Club celebró sus 100 años de existencia, se creó la Medalla al Mérito Cultural y Cívico “Club Ocaña 100 años”, otorgada a figuras de la vida comercial, política, académica y cultural del municipio, y un grupo selectos de damas entre quienes estaban, en diferentes años, Martha Jácome Quintero, Clemencia Patiño Pacheco, Magola Numa de Peñaranda, Ana Milena Ujueta Quintero, Elvira Isabel Mendoza Lemus, Leddy Jácome de Noguera y Loris Numa de Herrera, organizó excelentes semanas culturales con participación de artistas plásticos regionales y nacionales y músicos de prestigio. Fueron condecorados en aquellos certámenes culturales, personajes tales como la novelista Chela García Núñez, el compositor Alfonso Carrascal Claro el maestro Jorge Riveros, Monseñor Estanislao Mora, el Ingeniero y académico Raúl Pacheco Ceballos, el gramático y crítico literario Ciro Alfonso Lobo Serna, el historiador Jorge Meléndez Sánchez, el músico y compositor Carlos Guillermo Lemus Sepúlveda,  el médico y escritor Aurelio Carvajalino Cabrales, el profesor Francisco López Erazzo, el químico Edgar Alberto Páez Mozo y Luis Eduardo Páez García.

 En estos 120 años de historia institucional, el Club Ocaña presenta un balance positivo en cuento a sus aportes al desarrollo de Ocaña. La vieja casona situada a un costado de la Plaza del 29 de mayo, donde el Libertador Simón Bolívar se alojó a su llegada de la campaña del Bajo Magdalena en 1813, sigue conservado su encanto tradicional y el Club sigue siendo un hito en la cultura local digno de ser preservado y fortalecido para que quede como ejemplo a las nuevas generaciones de cómo sí es posible actuar desde lo privado hacia lo público cuando hay sentido de pertenencia y amor por el solar nativo.

 Patio central de la sede del Club Ocaña

El Club Ocaña ha sido epicentro de la actividad económica, social, política y cultural de la ciudad de Ocaña y ha hecho aportes importantes al desarrollo local, bien como institución o indirectamente a través de sus socios, que han sido dirigentes políticos, exitosos profesionales, benefactores de la sociedad, escritores, artistas y comerciantes.Sus diferentes Juntas Directivas, representadas en los respectivos Presidentes, han mantenido la tradición del centro social, desde su primer Presidente, Don Alejo Conde, en 1894, hasta 2014, bajo la dirección del Doctor Manuel José Cabrales Aycardi, a quien ha correspondido la conmemoración de los 120 años de vida institucional del Club.

El Doctor Manuel José Cabrales Aycardi,
actual Presidente del Club Ocaña


En estos 120 años de vida institucional, bien vale la pena recordar aquellos tiempos de bonanza económica de Ocaña y el compromiso de sus gentes para con la sociedad.

BIBLIOGRAFÍA

PÁEZ GARCÍA, Luis Eduardo. Historia de la Región de Ocaña. Jaguar Group Produccioes. Bogotá, 2009.

Revista Hacaritama. Órgano de la Academia de Historia de Ocaña.
Revista Mercantil. Año 1 No.1. 1 de agosto de 1895, y N° 6.