Por Luís Eduardo Páez García
Por gentil invitación del doctor Joaquín Santana Barbosa, hacemos hoy la presentación de la edición Nº 4 de la revista Diáspora, dirigida por el Presbítero Carlos Durán Hernández, donde actúa como Coordinador Académico don Antonio Lozano Pérez, reconocido ya por sus coterráneos carmelitanos como fiel defensor del patrimonio cultural de su solar nativo; como Asesores, Miguel Ángel Picón Sánchez, Joaquín Santana Barbosa y Pedro Amadís Santana Barbosa, y como corrector de estilo Juan Jacobo Carrizales Casas. Han querido los editores de esta bien presentada publicación cultural, dedicar sus páginas a Nuestra Señora de Rosario del Río de Oro, cuyos 350 años de arribo a la capital cultural del departamento del Cesar, se cumplieron recientemente.
Bien conocen los riodorenses el itinerario del milagroso lienzo, desde que el encomendero Don Lope Rabelo de Mariz lo adquirió en Tunja, hasta su donación a los agustinos, constituyéndose, esta serie de procesos, en la raíz del poblamiento de Río de Oro y de su evidente vocación mariana. Hace poco, Monseñor Aldo Cavalli, Nuncio de S.S. Benedicto XVI, consagró el altar de mármol, dedicó el templo parroquial a
Las publicaciones periódicas, en la región de Ocaña, son escasas hoy en día. Mantenerlas, ha significado siempre una lucha ardua donde la constancia ha de sobreponerse siempre a la poca colaboración económica de las comunidades hacia las cuales se dirigen. Pero de su permanencia en el tiempo, depende en buena parte la dinámica cultural de los pueblos y el conocimiento que podamos tener sobre la producción en artes y letras. Conocemos, personalmente, a la mayor parte de los autores de los artículos que hoy podemos apreciar en la edición Nº 4 de Diáspora. Les sabemos preocupados, de tiempo atrás por los avatares de la vida pública de sus respectivos municipios, por sus tradiciones culturales y por el rescate de su memoria histórica, tan importante para entender de dónde provenimos y para dónde nos encaminamos en estos tiempos confusos.
A Don Antonio Lozano Pérez, le conocimos hace ya muchos años, interesado en divulgar la cultura popular de El Carmen, como en efecto lo hizo a través de
Gabriel Ángel Lozano Pérez, hermano del anterior y quien ha participado activamente en la actividad cultural de su municipio, nos traza didácticamente el itinerario de la imagen mariana, destacando el bicentenario de la parroquia de El Carmen, cumplido el pasado 7 de noviembre.
Por su parte, los hermanos Joaquín y Pedro Amadís Santana Barbosa, conocidos ya por su participación en la cultura de Río de Oro, así como por sus publicaciones en la revista Facetas Terrígenas, del Centro de Historia “Miguel Jerónimo Niz” y la revista Hacaritama, de
El Licenciado Miguel Ángel Picón Sánchez, a quien recibiremos próximamente en
El Presbítero Carlos Toribio Durán Hernández, Director de la revista Diáspora, se remonta a la leyenda para contarnos “El milagro del aceite”, de la tradición oral de Brotaré, en buena hora impresa en estas páginas como homenaje, no sólo a Nuestra Señora del Rosario, sino a ese fecundo venero popular regional.
La edición Nº 4 de Diáspora, le apunta a la excelencia y sigue siendo fiel a los propósitos de las primeras ediciones: “…mantener vivo el afecto por la patria chica, por sus valores que compendian nuestro patrimonio cultural, que concurre a fortalecer y enriquecer la imagen de nuestra nacionalidad colombiana, expresados en la experiencia histórica, manifestaciones de fe, artísticas, arquitectónicas, musicales, tradiciones acendradas…memorias vernáculas que nos impulsan a reflexionar para que busquemos, propaguemos y realicemos proyectos culturales que susciten a los buenos hijos de nuestros pueblos, nuevos sueños, nuevos ideales, grandes metas por el bienestar integral del solar nativo”.
Como Presidente de
Resulta gratificante observar cómo, en medio de una zona castigada duramente por la violencia, resurge el interés por recuperar la memoria histórica y la actividad cultural en sus distintas expresiones. Los habitantes de Río de Oro y de El Carmen, en especial sus autoridades, deben fortalecer estas manifestaciones y proyectarlas departamental y nacionalmente. Nuestros pueblos, venidos a la vida republicana desde un común origen y ligados por fuertes nexos culturales, económicos y políticos, sólo han encontrado puntos coincidentes a través de la actividad cultural y es ella la que los integra y los hace grandes.
Para concluir, nuestro reverente saludo a las cunas ilustres de Don Luis A. Sánchez Rizo, Francisco Sánchez Arévalo y Luis Tablanca. Nuestro afecto y sincera felicitación a las directivas y articulistas de la revista Diáspora. Bitácora de apuntes del terruño, por su tenacidad y altura.
LUIS EDUARDO PÁEZ GARCÍA
Presidente de
Ocaña, 12 de diciembre de 2008
No hay comentarios:
Publicar un comentario